Los insectos poseen una amplia gama de morfologías y estilos de vida. Muchos de ellos llaman la atención al ser parásitos o parasitoides. Tal es el caso del gorgojo del espino que, como su nombre lo indica, parasita al espino (Acacia caven).
Antes de describir la historia de vida de esta especie quiero empezar diciendo que no se sabe a ciencia cierta si es nativo de Chile o no. Esto se debe a que su planta hospedera tampoco se sabe si es nativa o no. Existen entendidos en el tema que afirman que el Acacia caven fue introducida por habitantes precolombinos en Chile. Con ello habrían llegado también sus parásitos como el gorgojo del espino.
Además hay que hacer aclaraciones respecto a sus nombres pues no es un verdadero gorgojo, estos pertenecen a la familia Curculionidae y la especie aquí descrita es de la familia Chrysomelidae. Su nombre científico también ha variado a lo largo del tiempo y según el autor. Acá pongo un listado de las denominaciones que ha tenido:
Acanthoselides spinipes
Bruchus (Pachymerus) lallemanti
Bruchus spinipes
Mylabris lallemanti
Pseudopachymerina lallemanti
Pseudopachymerus lallemanti
Pseudopachymerus lallemantii
Foto sacada del siguiente link: http://coleoptera-neotropical.org/paginas/3_familias/Bruchidae/ch/Pseudopachymerina-spinipes.php
En Argentina el gorgojo del espino comparte su hábitat con otra especie similar Pseudopachymerina grata. Ambas especies pueden coexistir a pesar de sus estilos de vida similares ya que P. grata parasita preferentemente Acacia aroma. Una hipótesis acerca de su nula o casi nula competencia es que en el pasado su ancestro común poseía poblaciones que competían y que "resolvieron" esta competencia al adoptar árboles huéspedes distintos hasta evitar la reproducción entre una población y otra y derivar en dos especies diferentes que comparten un territorio (especiación simpátrida).
En Argentina también existe una especie muy similar en apariencia al espino Acacia caven, se trata de Acacia farnesiana que ha sido introducida y se ha naturalizado en diferentes partes del mundo. El gorgojo del espino P. spinipes también la parasita y se encuentra actualmente en muchos países donde se ha naturalizado su huésped argentino. Quizá sea un buen control biológico para Acacia farnesiana allí donde es una especie foránea, aunque siempre existe el riesgo de que "aprenda" a infestar las especies locales.
A la vez que el gorgojo del espino infesta al árbol, es también huésped de diferentes parasitoides en Chile como Usca espinae o Monoksa dorsiplana por mencionar algunos.
Esta especie no solo se reproduce en las vainas del espino, si no también en las de otras especies del Género Acacia, y se han citado casos en los que lo hace en otras plantas.
Luego del apareamiento la hembra coloca sus huevos en una vaina madura de espino y coloca sus huevos en grupos de 4 a 10. Las larvas al nacer deberán penetrar en la vaina para alcanzar las semillas. Penetran también las semillas y se alimentan de sus tejidos nutritivos para desarrollarse. Una vez transformadas en adultos, los gorgojos salen de la semilla dejando una perforación circular en la semilla fácil de apreciar en semillas atacadas. Para que puedan abandonar la vaina y encontrar pareja, el fruto debe haberse caído y/o quebrado por, por ejemplo, un senderista que lo haya pisado. Si para cuándo el gorgojo del espino salga y la vaina siga en el árbol, esta se habrá endurecido y su parásito tendrá que abrirse paso haciendo un hoyo en la vaina. En ocasiones no logran salir y mueren adentro. Aquellos que si pueden se dirigen a las flores a alimentarse de polen.
Vainas de espino atacadas por el gorgojo. Se puede apreciar los agujeros hechos por los insectos (foto de Benito Rosende)
En Argentina el gorgojo del espino comparte su hábitat con otra especie similar Pseudopachymerina grata. Ambas especies pueden coexistir a pesar de sus estilos de vida similares ya que P. grata parasita preferentemente Acacia aroma. Una hipótesis acerca de su nula o casi nula competencia es que en el pasado su ancestro común poseía poblaciones que competían y que "resolvieron" esta competencia al adoptar árboles huéspedes distintos hasta evitar la reproducción entre una población y otra y derivar en dos especies diferentes que comparten un territorio (especiación simpátrida).
En Argentina también existe una especie muy similar en apariencia al espino Acacia caven, se trata de Acacia farnesiana que ha sido introducida y se ha naturalizado en diferentes partes del mundo. El gorgojo del espino P. spinipes también la parasita y se encuentra actualmente en muchos países donde se ha naturalizado su huésped argentino. Quizá sea un buen control biológico para Acacia farnesiana allí donde es una especie foránea, aunque siempre existe el riesgo de que "aprenda" a infestar las especies locales.
A la vez que el gorgojo del espino infesta al árbol, es también huésped de diferentes parasitoides en Chile como Usca espinae o Monoksa dorsiplana por mencionar algunos.